De cuatro selecciones disputando una final a doble partido en 1984 a premios de 41 millones de euros y estadios abarrotados en 2025: la Eurocopa Femenina retrata, mejor que ningún otro torneo, la vertiginosa profesionalización del fútbol europeo de mujeres. A continuación, un recorrido edición por edición.
1984 · Suecia se estrena
La primera Euro femenina se jugó sin fase final concentrada: Suecia y Inglaterra superaron cruces a ida y vuelta hasta encontrarse en una eliminatoria decisiva de 180 minutos. Tras un 1-1 global, las suecas de Pia Sundhage se impusieron en los penaltis con un estadio semivacío, pero sentaron el precedente. A pesar de la falta de televisión en directo, la UEFA validó el experimento y allanó el camino a un campeonato estable.
1987 · El turno de Noruega
Noruega organizó la fase final ya con sede única y cuatro equipos, llenando los pequeños recintos de Oslo y Trondheim. La anfitriona derrotó 2-1 a Suecia con goles de Trude Stendal y G. Hansen, abriendo un tirón mediático inédito para la región nórdica. El torneo demostró que la rivalidad escandinava podía movilizar aficionados y prensa, presionando a la UEFA para seguir invirtiendo.
1989 · Alemania irrumpe
La República Federal de Alemania acogió la siguiente edición e introdujo retransmisión en abierto. Ante 22 000 personas en Berlín, la Mannschaft de Silvia Neid goleó 4-1 a Noruega y levantó un título que marcaría el inicio de una hegemonía histórica. Las audiencias televisivas —todavía modestas— crecieron, y la DFB apostó por profesionalizar parcialmente a sus jugadoras.
1991 · Alemania repite en Dinamarca
Con el primer Mundial femenino en el horizonte, la Euro sirvió como clasificatorio continental. Alemania volvió a superar a Noruega (3-1) gracias a los tantos de Heidi Mohr, consolidando estructuras semiprofesionales en la Bundesliga femenina. El interés mediático se desplazó a la Copa del Mundo, pero la Euro mantuvo prestigio competitivo.
1993 · Noruega rompe la racha
Italia se volcó con un torneo que llevó partidos a Cesena, Bari y Reggio Emilia. Ante 15 000 espectadores, Noruega venció 1-0 a la azzurra anfitriona. Aquella final elevó los estándares organizativos y dejó la última campeona no alemana en casi un cuarto de siglo.
1995 · Tricampeonato germano
La edición de 1995 redujo gastos volviendo al esquema de cuatro equipos. Pese al formato austero, Alemania se coronó 3-2 sobre Suecia en Kaiserslautern. Fue la tercera copa consecutiva y testimonio de la profundidad de talento germano, que ya nutría ligas y combinados juveniles.
1997 · Salto a ocho selecciones
Suecia y Noruega coorganizaron un torneo ampliado a ocho equipos y retransmitido en más de 40 países. Alemania venció 2-0 a Italia con Birgit Prinz emergiendo como referencia mundial. El aumento de participantes demostró la creciente competitividad y convenció a la UEFA de iniciar un ciclo de expansiones periódicas.
2001 · Alemania, anfitriona y campeona
Primera Euro con 15 partidos y cobertura pan-europea por satélite. Las locales necesitaron un gol de oro de Claudia Müller para tumbar a Suecia (1-0) en Ulm. El promedio de asistencia (8 000) duplicó la cifra de 1997, impulsando patrocinios específicos para el fútbol femenino.
2005 · Inglaterra marca tendencia
Ocho sedes inglesas acogieron la Euro y batieron el récord de público acumulado (118 403). Alemania derrotó 3-1 a Noruega y Inka Grings alcanzó cinco goles, cimentando su leyenda. La BBC registró cuotas de pantalla inéditas y la FA lanzó la Super League femenina como legado directo.
2009 · Finlandia rompe el molde
Se pasó a 12 equipos y 25 encuentros, con partidos en estadios nacionales de atletismo reconvertidos. Alemania se impuso 6-2 a Inglaterra; Grings rubricó otro doblete e igualó el registro histórico de Prinz. El experimento finlandés evidenció que el norte de Europa podía sostener grandes eventos pese a poblaciones menores.
2013 · Suecia, último acto germano
De vuelta a tierras suecas, la Euro contó con 217 393 asistentes —nuevo techo— y emisiones HD globales. Alemania ganó 1-0 a Noruega con tanto de Anja Mittag y elevó su octava copa. Sería la última antes del cambio de guardia que se avecinaba.
2017 · Cambio de guardia neerlandés
Con 16 selecciones por primera vez, Países Bajos vivió una fiebre naranja: el combinado de Vivianne Miedema derrotó 4-2 a Dinamarca en Enschede ante 28 000 personas. El título inspiró inversión gubernamental y convirtió a la Eredivisie femenina en profesional, rompiendo la hegemonía alemana tras 22 años.
2022 · Inglaterra rompe la maldición
La pandemia aplazó un año la Euro pero no apagó la expectativa. Wembley congregó 87 192 aficionados —récord absoluto de cualquier Eurocopa— y las Lionesses vencieron 2-1 a Alemania con gol de Chloe Kelly en la prórroga. El campeonato elevó los premios a 16 M€ y generó audiencias globales de 365 millones.
2025 · Suiza apunta alto
La próxima edición, del 2 al 27 de julio, se disputará en ocho sedes alpinas. Con 41 M€ en premios y cobertura multiplataforma, será la primera Euro plenamente profesional. Se esperan más de 500 millones de espectadores y una venta de entradas que superará el medio millón, confirmando el salto comercial de la competición.
Récords
- Títulos: Alemania (8)
- Goleadoras históricas: Birgit Prinz y Inka Grings (10)
- Mayor goleada: Alemania 13-0 Rusia (2005)
- Asistencia récord en un partido: 87 192 (final 2022, Wembley)
Evolución en cifras
Edición | Selecciones | Asistencia total | Premio económico | TV global (aprox.) |
---|---|---|---|---|
1984 | 4 | ~30 000 | 0 € | <5 M |
2005 | 8 | 118 403 | 600 000 € | 50 M |
2017 | 16 | 240 045 | 8 M € | 165 M |
2022 | 16 | 574 875 | 16 M € | 365 M |
2025* | 16 | >600 000 (prev.) | 41 M € | 500 M (prev.) |
*Estimaciones de la UEFA.