Los Clubes de Liga F celebraron Asamblea General Ordinaria y Extraordinaria y aprobaron por amplísima mayoría las cuentas de la temporada 2024/2025. Más allá del trámite, el titular económico es el reparto consolidado de 17 millones de euros entre los clubes: una decisión de gobernanza que convierte ingresos de la competición en estabilidad financiera y capacidad real de planificar a medio plazo.
Qué nos dicen los indicadores
El “producto Liga F” está ganando tracción en tres frentes a la vez.
- En televisión, la temporada pasada alcanzó una audiencia acumulada de 6,7 millones y un crecimiento cercano al 90% interanual, prácticamente duplicando registros. En la 2025/2026, tras 13 jornadas, ya se reportan subidas del 9% en televisiones autonómicas, del 10% en DAZN España y del 13% en DAZN internacional: señal de que el crecimiento no es solo doméstico.
- En estadios, la asistencia mejora un 18% en comparación con el mismo tramo de la temporada anterior.
- Y en digital, la liga se posiciona como referente europeo en engagement: más de 900.000 seguidores, 89 millones de impresiones y 190 millones de visualizaciones, con un +62% respecto a la campaña previa.

Por qué importa (y qué falta)
Un reparto de 17 millones no es solo “más dinero”: es una palanca para profesionalizar estructuras (comercial, datos, salud, operaciones), reducir dependencia de aportaciones puntuales y sostener plantillas competitivas sin hipotecar el futuro. El siguiente paso es fijar reglas aún más predecibles y orientadas a impacto.
Recomendación: ¿publicaría Liga F un marco multianual de reparto con métricas de sostenibilidad y desarrollo (base, asistencia, activación digital, cumplimiento financiero) para que cada club sepa qué decisiones de hoy garantizan viabilidad mañana?














