El Atlético de Madrid ya está en cuartos de final de la Copa de la Reina tras superar al Alhama CF en el Estadio José Kubala. La eliminatoria terminó sin goles y se decidió desde los once metros, donde el conjunto rojiblanco se impuso por 4-5 en la tanda de penaltis.
Un cruce sin margen y sin goles
El partido respondió a lo que suele exigir la Copa en cruces a partido único: máxima atención a cada detalle y poco espacio para el error. El Alhama CF sostuvo el duelo y llevó la eliminatoria a un escenario de igualdad, manteniéndose firme hasta el final del tiempo reglamentario.
El Atlético de Madrid, por su parte, tuvo que trabajar el encuentro con paciencia, sin encontrar la acción definitiva para romper el 0-0. Con el paso de los minutos, el cruce fue ganando tensión, con la sensación de que cualquier jugada aislada podía decidir el billete a cuartos.
La prórroga tampoco movió el marcador. Con las fuerzas más ajustadas y el cansancio acumulado, ambos equipos priorizaron no conceder situaciones claras y el partido se encaminó, ya sin sorpresas, hacia la tanda de penaltis.
La tanda de penaltis, decisiva
En los lanzamientos, el Atlético de Madrid fue más eficaz y cerró la clasificación con un 4-5. La acción clave llegó en el último penalti: Larqué detuvo el lanzamiento definitivo, sellando el pase rojiblanco a la siguiente ronda.
Con este triunfo, el Atlético de Madrid continúa adelante en la Copa de la Reina y se suma al grupo de equipos que ya esperan el sorteo y la disputa de los cuartos de final.
