“Ahora que lo estoy viviendo pues es animar a todas las que vienen detrás y decir: “Si que podéis llegar porque yo estoy aquí gracias a mi trabajo”
NOELIA GUTIÉRREZ MUÑOZ (Toledo, España)
Ha sido uno de los éxitos del deporte español en este 2025 y eso que es “árbitra”. Lo que nos ha enseñado que, sin ellos, el fútbol no existiría. El 7 de diciembre en Manila (Filipinas) hizo historia al convertirse en la primera mujer en arbitrar una final de Copa del mundo de fútbol sala.
Pero esta Toledana no se conforma con eso. ¿Por qué no soñar con arbitrar un mundial masculino? Talento, trabajo e ilusión no le faltan.
- Lo primero, desde “Las futbolistas” nos gustaría felicitarte y preguntarte ¿desde qué acabas la final del mundial, incluso yo diría que antes, pero la explosión final ha sido que arbitraras la final, cómo has llevado esta avalancha de medios de comunicación?
-Pues la verdad es que no estoy acostumbrada. Me ha venido todo de golpe y muy sorprendida. Pero lo estoy gestionando bien. Que se vuelquen en la figura del árbitro, que es complicado, pues es de agradecer. Eso me da muchísima visibilidad a mí y al colectivo arbitral así que super agradecida de que mostréis nuestra imagen públicamente.

- Vamos al principio de todo ¿En qué momento y por qué Noelia dice quiero ser árbitro?
-A mí me gustaba mucho el deporte. Yo venía de hacer esgrima. Otro mundo completamente diferente y me gustaba mucho el fútbol. Entonces como yo sé que de jugadora sería malísima, no he jugado nunca, pues dije voy a probar el arbitraje. Desde el primer día me enganché y hasta ahora: doce años después.
- ¿En doce años que llevas en esta travesía, has visto una evolución importante en la labor del arbitraje en España?
-En estas doce temporadas he visto la profesionalidad que se va ejerciendo más sobre el arbitraje, ya no tanto en el fútbol, que eso siempre entre comillas ha habido más, pero en el fútbol sala es donde más se ha notado esa mejoría. Antes éramos menos profesionales y ahora, cada vez, estamos creando más un cuerpo de élite muy bueno, al nivel de las divisiones que tenemos en España, que son de las mejores, así que está habiendo muchísimo cambio y aun así iremos todavía a mejor.
- Dijiste en su momento que era un premio, pero también una responsabilidad arbitrar este mundial, cuándo ya sabes que vas a pitar la final ¿cómo lo gestionas hasta que el balón empieza a rodar?
-Como es algo nuevo, nunca había tenido la oportunidad de vivir una experiencia así, la gestión fue muy diferente. Es verdad que estoy más acostumbrada a pitar en copas o supercopas pero aquí en España pero un mundial, el primer mundial de la historia conlleva una responsabilidad el doble y los nervios son el doble porque es algo muy importante. Intenté gestionarlo de la misma manera que lo hago aquí en España. Mucha concentración, mucho repasar reglamento mentalmente para que en el momento que haya algo estar preparada e intentar aislarme un poco mentalmente del foco que había para que no me afectara a la hora de pitar porque es verdad que salir a arbitrar la final de un mundial con un Portugal-Brasil, si no estás muy concentrada pueden pasar muchas cosas.
- Además, el mundial no ha sido en Italia, si no en Filipinas, ¿te ha costado manejar la distancia, la cultura, la comida, horarios, o has podido disfrutar algo?
-Hemos podido disfrutar. Es verdad que los árbitros llegamos doce días antes y en esos días te da tiempo a aclimatarte a la comida, al clima, a los horarios. Entonces una vez ya empieza la competición ya estamos muy metidos en la vida filipina y ya estábamos a tope.
- Hay que recordar que, además de la primera división femenina, ¿ya eres la primera mujer que arbitra en España en la segunda división masculina, notas más presión por el hecho de ser mujer?
-Presión, no. Noto un poco más de dudas cuando me ven llegar al pabellón que dicen ¿esta chica? Aunque ya es mi segunda temporada y ya me conocen todos…al principio si notaba más como incertidumbre, dudas de ¿pitará la chica? Pero ahora ya estoy metida en la plantilla. Soy una más, ya me conocen y no noto esa diferencia como alomejor hace unos años si se notaba.

- Más que preguntarte por lo que habrás vivido en los campos prefiero preguntarte si a día de hoy notas que ya hay cierta concienciación en cuanto a que el fútbol es igual o debe de ser igual para hombres y mujeres?
-Si. Cada vez más. Cuando yo empecé el fútbol femenino tenía muy poca visibilidad, muy poco auge, no lo conocía nadie y ahora desde que Iberdrola metió esa inyección para subirlo y que la gente lo viera sí que se está notando. Ahora de hecho hay muchísima gente que entiende mucho de competiciones femeninas y que las consume que eso es lo más importante.
- Noelia que árbitra ambos sexos, no en cuanto a juego que es lógico, pero qué diferencias puedes ver entre arbitrar masculino y femenino?
-Yo estoy un poco más cómoda pitando en masculino. Es raro decirlo, pero es verdad que cuando pitas a chicos respetan un poquito más. Las mujeres al verte mujer cogen más confianza y suele haber más protestas y los partidos un poco más complicados. A mí me gusta pitar las dos cosas, pero es verdad que me siento más cómoda pitando chicos. Me respetan un montón, es un juego un poco más rápido por lo que es un poco más sencillo de pitar también, pero vamos muy contenta con los dos.
- ¿Te escuché decir que la federación está haciendo una gran labor para respaldar el arbitraje femenino, lo estás notando?
-Si. Aparte de que la federación se sienta en la meritocracia es verdad que en el arbitraje femenino están haciendo una labor buenísima tanto de preparación como e incluirnos dentro de grupos masculinos, que antes era muy complicado. La verdad que yo lo estoy notando muchísimo y lo agradezco, al fin y al cabo, ellos son los que nos impulsan a las mujeres en decir: “sí que se puede” siempre que haya un trabajo detrás y obviamente respondas a lo que te piden, pero para ellos el podernos impulsar a las ligas masculinas y a las ligas profesionales es lo más importante que tenemos nosotros.
- Lo que, si ha cambiado y lo hemos visto seguramente con tu éxito, es que los medios de comunicación, instituciones… lo vemos como un éxito del deporte español, cuando, seguramente, antes un árbitro era otra cosa y debería ser así, porque al final el que ama esto sin árbitro no existiría.
-Si. Yo siempre lo digo. Nosotros somos la parte fundamental del fútbol. Sin nosotros no existirían los partidos. Entonces, agradezco a los medios, a gente como vosotros, que nos incluís ahí en vuestros reportajes y en vuestros documentales porque nosotros somos un personaje dentro del fútbol que no se nos conoce mucho. Somos la diana donde todos quieren ir a parar, entonces que vean que somos personas humanas, que vean que tenemos mucho trabajo detrás y que también nos podemos equivocar.

- ¿En qué crees que puede servir todo este boom que ha surgido contigo o en que puede ayudar al arbitraje femenino?
-Yo creo que esto es un escaparate para todas aquellas chicas que vienen detrás. En fútbol sala hay muchísimas muy buenas que estoy segura que van a acompañarme de aquí a poquito y yo creo que este escaparate sirve para aquellas que dudan de si es posible o no que digan “Es posible”. Si hay una chica española que ha conseguido llegar a un mundial y ha conseguido llega a la final ¿por qué yo no? Yo, por desgracia no tuve referentes femeninos y sí que se me generaron dudas de oye, ¿una mujer podrá algún día llegar? Y ahora que lo estoy viviendo pues es animar a todas las que vienen detrás y decir: “Si que podéis llegar porque yo estoy aquí gracias a mi trabajo”
- Siempre se habla de la importancia del entorno en el deportista, en la familia, etc… ¿cómo lleva tu entorno tu profesión?
-La familia y el apoyo es lo más importante. Mi trabajo es muy complicado. Sufre mucho, como yo, me ven trabajar y tampoco es recompensado en un partido porque nosotros siempre salimos un poquito más perjudicados y ellos desde dentro lo ven. Si yo fallo un penalti me tiro una semana en casa muy jodida y sufriendo porque he fallado mi trabajo, entonces ese ánimo y ese respeto que tienen hacia mi profesión hacen que me desentienda de todo, que los cuarenta minutos que dura un partido pueda estar a tope y me pone las cosas muy fáciles. Al fin y al cabo, cuando en casa tú tienes las cosas fáciles luego vas a tu trabajo y lo puedes desempeñar mejor.
- La pregunta que se hace mucha gente es, a nivel profesional como es el tuyo, ¿te da el arbitraje para vivir bien?
-Esa pregunta me la hacen mucho. Yo de momento estoy trabajando. Es verdad que siendo FIFA sí que se puede vivir más exclusivamente. Yo trabajo porque soy joven y al fin y al cabo no quiero acabar mi carrera en el arbitraje a los cuarenta y cinco años, si dios quiere, y encontrarme sin una vida laboral. Entonces mientras pueda compaginarlo que, de momento, mis jefes me están dejando porque estoy muchos días fuera de casa, pues continuaré hasta que pueda y si ya llegara un punto de tomar una decisión pues dejar el trabajo y continuar con el arbitraje.
- Cuando vuelves a arbitrar dentro de la “normalidad”, ¿qué te has encontrado?
-Se me ha hecho raro porque al fin y al cabo todas las directrices que usamos en mundial son muy diferentes a las que usamos en España. Las reglas son prácticamente las mismas, cambian muy poco, pero la forma de leer el partido y de arbitrar es muy diferente. Entonces me he tirado un mes pitando mujeres y ahora me he encontré en Melilla que tuve que cambiar el chip y decir: “Noelia. Ya estás aquí otra vez, se ha acabado el mundial. Ahora toca la segunda división y hay que estar a tope, pero cuando cambias el chip cuesta. Todavía estás ahí en una fase de decir esto aquí si y aquí no…
- ¿Cómo sabemos que en la vida nadie regala nada, detrás de esta final y ser elegida para este mundial, qué es lo que se puede contar que hay detrás? Viajes, familia, sacrificio…
-Un árbitro es árbitro las veinticuatro horas del día y los siete días de la semana. Así durante toda la vida. Entonces desde que te levantas son: entrenamientos, repaso de reglamento. Tenemos muchísimas reuniones al cabo del mes. Yo tengo, reunión de mi delegación de Castilla La Mancha, de la española, de Uefa, de Fifa, de mundial. Tenemos muchísimo trabajo de análisis de partidos, pruebas físicas, partidos que llega el fin de semana y tienes que rendir. Entonces, todo ese trabajo que está detrás, que no se ve es lo que, metiendo muchísima disciplina, es lo que te hace llegar a la final de Filipinas.
- Siempre pregunto cuál es el sueño de uno…Uno, imagino, ya está cumplido ¿y ahora qué?
-Mi objetivo es llegar a primera división masculina. Ese es el objetivo. Ese era el objetivo principal. Es verdad que me han ido saliendo las cosas muy bien y he conseguido estar en un mundial. Ya lo he desbloqueado lo del mundial. Ahora lo siguiente es subir en algún momento a primera división masculina y a raíz de ahí pues por qué no optar a alguna eurocopa o a algún mundial masculino. Eso ya es soñar muy grande, son palabras mayores, pero yo creo que, si todo va bien, se sigue trabajando y van saliendo las cosas bien pues ¿por qué no?













