Arsenal, Chelsea, Manchester City y Manchester United ya están en semifinales de la Subway Women’s League Cup tras un domingo de cuartos con cuatro guiones muy distintos: de la pegada desatada a la remontada con paciencia.
Los resultados de cuartos
- West Ham United 1–5 Manchester City
- Manchester United 2–1 Tottenham Hotspur
- Crystal Palace 0–2 Arsenal
- Liverpool 1–9 Chelsea
Las semifinales se jugarán entre el 21 y el 22 de enero de 2026, con estos cruces:
- Arsenal–Manchester United
- Manchester City–Chelsea.
West Ham United 1–5 Manchester City
En Dagenham, el Manchester City se puso el abrigo de invierno en ocho minutos: salida agresiva, recuperación alta y dos zarpazos tempranos que desordenaron al West Ham. El 1–2 no llegó: llegó el 1–5, con un partido que se abrió por las bandas y terminó con la sensación de superioridad sostenida, incluso cuando las locales encontraron un respiro con el 1–2.
Manchester United 2–1 Tottenham Hotspur
El duelo de Leigh fue otra historia. el Tottenham golpeó primero y obligó al Manchester United a mirarse al espejo: el tipo de noche que se decide más por la respuesta que por el plan inicial. United apretó tras el descanso, subió ritmo y altura, y la remontada (2–1) fue un ejercicio de insistencia más que de inspiración.
Crystal Palace 0–2 Arsenal
En el sur de Londres, El Arsenal hizo lo que suelen hacer los equipos que no se desesperan: transformar el dominio en ventaja sin precipitarse. Y con un detalle con acento español: Laia Codina abrió el marcador de cabeza tras un córner. El Crystal Palace resistió y tuvo sus momentos, pero el 0–2 ya en el descuento cerró una eliminatoria que se había ido inclinando por acumulación.
Liverpool 1–9 Chelsea
Y en St Helens no hubo eliminatoria: hubo pesadilla antes de Navidad. El Chelsea desbordó al Liverpool con una producción ofensiva brutal (1–9), de esas que dejan el partido resuelto antes de que aparezca el debate táctico. Mucha gente marcará el resultado; dentro, lo que explica el choque es la mezcla de eficacia, ritmo y la facilidad con la que Chelsea convirtió cada pérdida y cada segundo balón en una nueva ola.













