La ausencia de Aitana Bonmatí durante cinco meses obliga al FC Barcelona a reinventarse en la medular. En el duelo ante Tenerife, Pere Romeu probó con Schertenleib y Vicky López en el puesto de la tres veces Balón de Oro, buscando nuevas fórmulas para mantener el pulso competitivo.
El primer experimento no cuajó: las azulgranas cerraron la primera parte sin disparos a puerta, un dato inusual para un equipo que promedia más de 6 tiros a portería por partido. El giro llegó tras el descanso, cuando Vicky López ocupó el interior derecho y aportó dinamismo y llegada, firmando un 79% de acierto en pase en el último tercio. «Me siento cómoda ayudando al equipo donde haga falta», confesó la joven madrileña tras el encuentro.
Con la vuelta de Patri Guijarro en el horizonte y opciones como Serrajordi, Pina, Kika o incluso la canterana Rosalía Domínguez, Romeu tiene alternativas para cubrir una baja tan sensible. La próxima jornada será clave para ver quién se consolida en ese rol tan determinante.
Fuente: AS.








