Justine Madugu fue recibido como héroe en Abuja tras guiar a Nigeria a su décima corona en la Women’s Africa Cup of Nations 2025. A sus 61 años, el técnico nigeriano —finalista al Balón de Oro como mejor entrenador de equipos femeninos— vive un momento dorado, pero ya piensa en el futuro: «Lo que logramos en la última Wafcon es pasado. Ahora todos querrán competir contra nosotras», advierte.
Madugu, graduado en biblioteconomía y exasistente durante 12 años, ha transformado el estilo de las Super Falcons. Frente a los planteamientos defensivos de sus predecesores extranjeros, apuesta por un fútbol más expresivo y ofensivo: «Como africanos, nos gusta expresarnos en el campo. Cuando recuperamos el balón, atacamos».
Con contrato hasta 2027 y una prima estatal superior a 100.000 dólares, Madugu no se conforma. Su gran objetivo es defender el título continental en Marruecos y convertir a Nigeria en candidata real al Mundial 2027 en Brasil. «Debemos creer en nuestras capacidades y mejorar instalaciones y bienestar de las jugadoras», subraya.
Más allá de los éxitos deportivos, Madugu insiste en formar personas: «Animamos a las futbolistas a volver a estudiar; hay vida después del fútbol». Su ambición es histórica: hacer de Nigeria la primera selección africana —masculina o femenina— en levantar una Copa del Mundo.
Fuente: The Guardian.
