Este fin de semana, Kate Longhurst vivirá la Women’s FA Cup desde una perspectiva inédita: la del cuerpo técnico. Tras colgar las botas al final de la pasada temporada, la exjugadora asume el reto como asistente en el Nottingham Forest, que se enfrenta al Wolverhampton Wanderers en la tercera ronda.
Longhurst, con más de veinte años ligada a la competición —incluida una final con gol en 2012—, reconoce la emoción de volver a vivir la copa, ahora desde el banquillo. «Es casi más emocionante cuando estás en un equipo de menor categoría y te toca un rival grande», reflexiona sobre sus inicios en el Colchester United y el sorteo ante el Arsenal.
El cruce ante Wolves no será sencillo. «La temporada pasada fueron probablemente el rival más duro que enfrentamos», admite Longhurst, consciente de que ambos equipos comparten pasado reciente en la tercera división y que las Wolves buscan demostrar su nivel para ascender a WSL2.
Sobre su salto a los banquillos, Longhurst confiesa que no lo tenía planeado, pero ve en esta oportunidad una forma de aportar su experiencia y tender puentes entre jugadoras y staff. «Quiero poner todo de mi parte para ayudar al club a progresar y aportar una perspectiva diferente tras tantos años como futbolista».
Fuente: She Kicks.












