La selección alemana llega al cruce de cuartos de final de la Euro 2025 con la moral tocada tras la dura derrota por 4-1 ante Suecia. El técnico Christian Wück intenta reanimar a un grupo que, pese a clasificarse con antelación, ha mostrado grietas defensivas y falta de cohesión.
Las críticas en casa no han tardado: medios como Welt y BILD hablan de una Alemania «históricamente floja» y lejos de la élite mundial. La expulsión de Carlotta Wamser y la lesión de la capitana Giulia Gwinn dejan a Wück sin laterales titulares, obligando a improvisar con jóvenes como Franziska Kett, apenas con minutos en Bundesliga.
Un gigante herido busca redención frente a Francia
Aunque el ataque alemán ha brillado en otras fases del ciclo —con nombres como Jule Brand, Klara Bühl y Lea Schüller—, el equipo aún no ha alcanzado su mejor versión ofensiva en el torneo. Francia, liderada por una inspirada Delphine Cascarino, amenaza especialmente por bandas, justo donde Alemania es más vulnerable.
Pese a las dudas, Wück mantiene su apuesta ofensiva: «No está en nuestra naturaleza encerrarnos atrás». Pero la presión es máxima: una eliminación ante Francia podría acelerar los cambios en un gigante europeo que busca reencontrarse con su historia.
Fuente: The Guardian.
